EL PAIS:Un sismo de 4,4 grados sacudió Córdoba "Se sintió fuerte pero sin víctimas ni daños materiales"
El temblor ocurrió a las 6:42 y fue percibido por varios pobladores de la zona y de los edificios más altos de la capital. "La verdad es que se sintió fuerte", dijo el secretario de Gobierno de la localidad de Tanti, epicentro del fenómeno.
Un sismo de 4,4 grados de magnitud se produjo en la mañana de hoy en Córdoba y el temblor fue percibido por varios pobladores de la zona y de los edificios más altos de la capital.
Según lo informado por el Instituto Nacional de Prevención Sísmica (INPRES) el sismo se produjo a las 06:42:54 de hoy, a unos 87 kilómetros al este de Córdoba.
El epicentro del movimiento telúrico se produjo a unos 23 kilómetros de profundidad.
"La verdad es que se sintió fuerte. Tanti está en una zona montañosa, la zona de Los Gigantes, donde este tipo de actividad en alguna medida sucede", dijo en Primera Mañana por LT9 el secretario de Gobierno de la localidad cordobesa, Emiliano Paredes.
A 9 días del terremoto en San Juan, el intendente de Pocito visitó la comunidad del Abanico
La comunidad del Abanico, del Departamento Pocito, recibió la visita del intendente Armando Sánchez , quien llegó acompañado por la ministra de Salud de San Juan, Alejandra Venerando, luego de nueve días del desastre que ocasionó el terremoto del lunes 18 en la provincia.
Miguel Ambas, integrante de la Asociación Civil Retamo y comunicador en Radio La Lechuza, que junto a los vecinos y vecinas organizan la olla popular que asiste a las familias afectadas por el sismo, entre otras tareas de ayuda y acompañamiento en el barrio, criticó la ausencia del Estado en este momento y aseguró que “el sálvese quien pueda acá no funciona”.
“Acá hay una olla popular, 200 personas comiendo hace nueve días cuatro comidas al día y todavía sin que haya llegado un paquete de azúcar del Gobierno provincial”, enfatizó.
“Sólo en el distrito del Abanico más de 50 familias, el 70% de la población, hemos perdido nuestros hogares por completo. Todos, hombres, mujeres, niños y ancianos, nos encontramos a la intemperie. Las condiciones de higiene son deplorables, ya que no contamos con lugares para aseo personal. Solo la solidaridad de los vecinos y organizaciones de San Juan y todo el país nos permiten acceder a la comida diaria y ropa. Por eso solicitamos la presencia de una autoridad política de peso para discutir un plan de emergencia”, expresa el comunicado de los vecinxs autoconvocados.
El terremoto de 6.4 en la escala de Ritcher que sorprendió a los y las sanjuaninas el pasado lunes 18 por la noche generó daños materiales en calles, rutas y casas. Muchos de esos hogares no están en condiciones de volver a ser habitados ante el alto riesgo de derrumbe. Dada esta situación, hombres, mujeres, niños y niñas duermen en la calle desde hace nueve días.
“Todavía no tenemos una respuesta formal de porqué las escuelas del Departamento no se abrieron. Tenemos un salón de usos múltiples a 300 metros de acá perfectamente acondicionado, anti sísmico, y tenemos a niños durmiendo en la calle que todavía no salen del shock del terremoto”, cuestionó Ambas.
Gastón Oro y Roberto Fuentes, voceros de los vecinos unidos del Abanico, expresaron que necesitan trabajar de manera articulada con el Estado. “La urgencia que necesitamos es saber qué va a traer el municipio y empezar a trabajar en conjunto. Si no hacemos esto, nadie viene y dialoga con nosotros”.
Las autoridades del Departamento y de la provincia recibieron el petitorio por escrito de los habitantes de la comunidad y se comprometieron a solucionar esta situación en la brevedad tomando la propuesta de articular en conjunto Estado y comunidad la salida más rápida posible.
A una semana del terremoto continúan las tareas de asistencia y reconstrucción
El 18 de enero pasado San Juan volvió a ser noticia. Un terremoto de 6.4 en la escala de Ritcher se registró a las 23.46 horas de la noche del lunes. Esta vez no hubo víctimas fatales pero sí un importante nivel de daños materiales en casas, edificios, calles y rutas de la provincia.
En la localidad Abanico, Departamento Pocito, donde se encuentra ubicada Radio La Lechuza, más de 50 familias perdieron sus casas y entre los y las integrantes de la emisora, vecinos y vecinas y algunas organizaciones se dividen diversas tareas para asistir y acompañar a los afectados y terminar de demoler aquellas estructuras alcanzadas por el terremoto para volver a levantarlas en otro momento.
“Las paredes cedieron para afuera, arrastraron los palos. Está a milímetros de que eso se caiga, así que no podemos habitar ni siquiera las piezas. Es muy feo. Muchas familias han pasado por lo mismo y los entiendo. De golpe y porrazo quedarte sin nada, sin un techo para tus hijos”, lamentó una de las vecinas en diálogo con La Lechuza.
“Perdimos muchas cosas pero lo importante es que estamos todos bien”, expresó otra habitante del barrio mientras uno completaba que “todo lo que está roto es material”.
En un predio frente a las instalaciones de la emisora comunitaria se instaló una olla popular con desayuno, merienda y cena; y una carpa, que cumple con la función de almacén de alimentos. Por su parte, el salón contiguo a los estudios de la radio fue dispuesto para la recepción de donaciones de organizaciones sociales y personas individuales.
“He visto mucha solidaridad hasta incluso con los mismos vecinos. Tienen la casa abajo y vienen y te dice »¿necesitas ayuda?» y vos sabes que están en peores condiciones que uno”, describieron.
Mientras se organizan y ejecutan distintas tareas y actividades para acompañar a las familias que tuvieron pérdidas materiales en distintos niveles, el Estado provincial sigue ausente.
“Lo importante es que necesitamos una ayuda. Acá yo alquilaba y se ha derrumbado todo. No hay solución de nada”, lamentó una de las afectadas.
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