Los jugadores “deben estar protegidos por los principios y derechos fundamentales en el trabajo”, expresó Guy Ryder, director general de la OIT, durante la ceremonia de la firma en esta ciudad suiza.
El acuerdo crea un nuevo marco de negociación internacional entre el Foro Mundial de Ligas (WLF en inglés), la cual representa a 44 ligas nacionales de fútbol profesional que comprenden unos 1100 clubes, y el sindicato mundial de futbolistas Fifpro (Federación Internacional de Asociaciones de Futbolistas Profesionales).
La Fifpro representa a más de 60 000 futbolistas profesionales a través de 66 sindicatos nacionales de jugadores en África, América, Asia, Europa y Oceanía.
El acuerdo, firmado por el mexicano Enrique Bonilla de la WLF y el español David Aganzo de la Fifpro, compromete a las partes, que habían realizado varias reuniones a lo largo del año, a asumir una mayor responsabilidad en la búsqueda de soluciones colectivas a los desafíos que enfrenta la industria.
“Organizaciones de empleadores y de trabajadores libres, independientes, fuertes y representativas, junto con la confianza, el compromiso y el respeto de los gobiernos por la autonomía de los interlocutores sociales, son condiciones clave para un diálogo social efectivo en el fútbol”, dijo Ryder.
Se reconoce que los estándares acordados colectivamente mejorarán las relaciones laborales en el juego profesional, así como la viabilidad y el crecimiento de ese deporte multimillonario.
El acuerdo proporcionará una plataforma para discutir las reglas para proteger la salud y la seguridad de los jugadores, junto con el compromiso de mejorar la representación y participación de las ligas nacionales, sus clubes miembros y sindicatos de jugadores.
Además, reconoce la necesidad de una mayor representación y consideración del fútbol femenino, incluidas las cuestiones relacionadas con las competiciones nacionales, los clubes y las jugadoras, y se considera prioritario construir relaciones profesionales entre ligas y sindicatos de jugadoras de fútbol a nivel internacional.
“El fútbol tiene el poder de inspirar y unir a personas de todas las nacionalidades y condiciones sociales, independientemente del género y la etnia”, apuntó Ryder.
La Fifpro y la WLF coincidieron en que se ha logrado un progreso significativo a través de acuerdos nacionales entre ligas y uniones en varios mercados de fútbol femenino, pero aún se puede acelerar “para satisfacer las necesidades específicas de esa industria en crecimiento”.
Las negociaciones también pueden incluir cuestiones como las normas laborales, el manejo de conmociones cerebrales, medidas para abordar la discriminación y el racismo, incluso en las redes sociales, y otras formas de abuso.
La OIT se prepara como entidad que brinde asesoramiento en áreas en las que tiene experiencia, incluida la implementación del acuerdo.
El acuerdo sigue principios y derechos fundamentales en el trabajo establecidos por la OIT y hace referencia específica a los convenios 87 y 98, sobre libertad sindical y protección del derecho de sindicación, y sobre el derecho a la negociación colectiva.
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